Loor a Dios, la oración y el saludo sean sobre nuestro señor Enviado de Dios, su familia y compañeros,
Señoras y señores Ministros,
Estimados colegas diputados,
Señoras y señores,
De conformidad con las disposiciones de la Constitución, clausuramos hoy los trabajos del primer periodo de sesiones del quinto año legislativo de la décima legislatura, respecto a las sesiones plenarias, ya que nuestro sistema parlamentario prevé la continuación de la labor de las Comisiones Parlamentarias Permanentes durante todo el año, lo que constituye una de las características de nuestra democracia institucional.
La clausura de este período de sesiones tiene lugar en un contexto nacional muy especial, marcado no sólo por la pandemia que sufre la humanidad durante más de un año y que afecta a los diferentes aspectos de la vida, sino también por los acontecimientos, logros y éxitos acumulados por nuestro país bajo el liderazgo de Su Majestad el Rey Mohammed VI que Dios le Asista. Nos sentimos muy orgullosos de que la Cámara de Representantes, con otros poderes e instituciones, forma parte de esta dinámica nacional, en aplicación de las directrices e instrucciones de Su Majestad el Rey, incluidas las figuradas en el discurso real dirigido por Su Majestad con motivo de la apertura del actual año legislativo y que supone una de las referencias de nuestro trabajo.
Cualesquiera que sean los contextos, los desafíos y los sacrificios que se nos exigen, la cuestión de nuestra integridad territorial ha estado, está y seguirá estando al frente de nuestras preocupaciones y acciones. La intervención decisiva, profesional, decidida y pacífica de las Fuerzas Armadas Reales con fecha de 13 de diciembre de 2020 para poner fin a la situación creada por un grupo delictivo bloqueando el tráfico en el paso de Guergarate en el extremo sur de Marruecos y obstaculizando la circulación en la ruta de tránsito internacional hacia otros países africanos, fue un paso decisivo en una acción de campo contra los actos ilegales.
Las Fuerzas Armadas Reales actuaron, en el marco de la legitimidad y de manera pacífica pero decidida, respaldadas por la legitimidad de la posición de Marruecos, de una fuerte movilización nacional y de la posición nacional unificada detrás de Su Majestad el Rey Mohammed VI, que Dios Le Asista. A estas fuerzas y a su Comandante Supremo, Su Majestad, todo el reconocimiento y el debido respeto y reverencia. A diferencia de las ilusiones de los enemigos de nuestra integridad territorial, las posiciones internacionales, africanas y regionales saludaron las acciones emprendidas por nuestro país, basadas en la legitimidad y destinadas a hacer cumplir la ley. Contrariamente a sus posiciones fuera de lugar, y también aisladas a nivel internacional, llegó la posición de los Estados Unidos de América adoptada el día 10 de diciembre de 2020 sobre su reconocimiento oficial de que los territorios recuperados del sur de Marruecos forman parte integrante del territorio nacional marroquí. En el mismo orden de ideas, varios países han seguido abriendo consulados en las regiones del sur marroquí: Layun y Dajla en el marco de la consolidación de la legitimidad.
A este respecto, en la Cámara de Representantes sólo podemos apreciar altamente la posición de los Estados Unidos, país amigo y aliado de Marruecos, y la de nuestros hermanos y amigos de diversas regiones geopolíticas que respaldan la legitimidad y apoyan nuestra integridad territorial.
Permítanme, hermanas y hermanos míos, en este momento constitucional, y en vista de esta coyuntura histórica en el curso de nuestra causa nacional, recordar a quienes necesitan que se les recuerden algunos de los fundamentos relativos al conflicto artificial sobre nuestra integridad territorial:
El primer fundamento: se trata de una causa crucial; no estamos viviendo un conflicto sobre las fronteras, sino una lucha nacional legítima para establecer la legitimidad y la existencia. Nuestra existencia como nación y Estado arraigado en tanto que entidad, instituciones, civilización, riqueza, diversidad cultural y contribución continental e internacional a la construcción de un mundo estable en el que se respete la soberanía de los Estados.
El segundo fundamento, la ilusión que prospera entre las partes que son hostiles a nuestros legítimos derechos históricos, cuyas contradicciones saltan a la vista y se está disipando. El proyecto separatista se está dirigiendo a su destino consistente en la desaparición. Primero, gracias al aferramiento de nuestros hermanos, habitantes de los territorios del sur, a su marroquidad y su participación en el fortalecimiento del trabajo de las instituciones nacionales, incluyendo la Cámara de Representantes, y el resto de las instituciones constitucionales y electas y las instancias de gobernanza, así como en la gestión de los asuntos del país. En segundo lugar, gracias a la cohesión nacional forjada a lo largo de los siglos entre los componentes de la nación, y fortalecida hoy en día por los proyectos de desarrollo estructuradores objeto de ejecución en las provincias del sur.
Por otra parte, es muy absurdo que algunos imaginen que Marruecos es el único país del mundo que, a finales del siglo XX y principios del siglo XXI, se conduzca a dividirse de su territorio nacional. A diferencia de ciertas distorsiones y lecturas fragmentarias y amputadas de las prácticas internacionales, todos los casos comparados han demostrado que los países colonizados han recuperado sus territorios y completado su integridad territorial, mientras todos los intentos de secesión de hace al menos 40 años se han enfrentado al firme rechazo popular, formal e internacional de los proyectos de fragmentación y división.
El tercer fundamento, el posicionamiento de nuestro país, geopolítico y económico, como un pilar de la estabilidad regional, continental e internacional, una fuerza económica, política y democrática creciente y su papel en la prevención de los peligros del terrorismo y las causas de la inestabilidad, lo han convertido en un importante socio internacional creíble e imparcial en la región euromediterránea, el continente africano y el mundo. No cabe duda de que esta credibilidad y confianza van reforzadas por el plan marroquí de autonomía presentado por nuestro país desde 2007, y considerado por la comunidad internacional y las fuerzas influyentes en la resolución internacional la única iniciativa creíble y realista y la base para una solución viable, sostenible y realista del conflicto artificial sobre nuestros territorios del sur. Por otro lado, otras partes siguen siendo presos del pasado rígido, en lugar de participar en la dinámica de la historia abierta sobre la construcción del futuro y el afrontamiento de los verdaderos desafíos comunes. No es de extrañar que en estos días prospere para dichas partes el discurso mediático de desinformación, de la fabricación de heroicidades ficticias y la mentira sobre la opinión pública. Este es otro ejemplo patente de la perdida diplomática.
Señoras y señores,
Al igual que el resto de los países del mundo, nuestro país hace frente a la pandemia de Covid-19, sus repercusiones y su elevado costo económico y social. En todos los capítulos de la lucha contra la epidemia, incluido el confinamiento sanitario y las legislaciones financieras, económicas, sociales y sanitarias necesarias, luego la fase posterior al confinamiento con las exigencias financieras y el acompañamiento de las empresas, llegando a la campaña nacional de vacunación, lanzada por Su Majestad que Dios le Asista el 28 de enero, se refleja la clarividencia, la prospectiva, el valor y poder del liderazgo de S.M el Rey Mohammed VI cargado de sentidos humanos, determinación en la protección de la sociedad y preservación de los derechos, consolidación de los valores de la solidaridad y sentido de previsión, en uno de los contextos más difíciles que la humanidad haya conocido jamás en la era actual... Un liderazgo rodeado por el pueblo marroquí con sus diversos componentes, sectores e instituciones.
Esto ha permitido a nuestro país transformar la crisis en oportunidades, los riesgos en prevenciones colectivas, la falta de recursos en iniciativas prácticas viables, el déficit social en un movimiento de solidaridad y el establecimiento de las bases del Marruecos posterior a Covid-19 en el contexto de los cambios mundiales que está creando en los modelos económicos, la producción, los servicios y las relaciones. Los modelos y la práctica comparada de la gestión de la pandemia han demostrado la eficiencia, la eficacia y la distinción de la gestión marroquí de la epidemia y sus consecuencias.
Señoras y señores,
Como ya he mencionado en ocasiones anteriores, se supone que toda dinámica social tenga eco en la institución legislativa, que está obligada a interactuar y responder a las necesidades y expectativas de la sociedad, en lo que se refiere al control y la legislación y en materia de evaluación de las políticas, de diplomacia parlamentaria, de comunicación con la opinión pública y de desempeño de las misiones representativas.
A tal efecto, nuestra Cámara ha continuado ejerciendo su competencia constitucional y cumpliendo sus funciones, teniendo en cuenta este contexto especial, interactuando con las grandes y principales cuestiones nacionales y teniendo presente las directrices de Su Majestad que Dios Asista, en particular las que figuran en el discurso de Su Majestad con motivo de la apertura del actual periodo de sesiones.
De este modo, la Cámara ha velado respecto al control parlamentario por estar cerca e interactuar con las cuestiones de la sociedad, ya que dos de las cuatro sesiones plenarias sobre la política general celebradas por la Cámara en este periodo de sesiones, han sido dedicadas a la causa nacional en dos ejes. El primero relativo a los proyectos de desarrollo en las regiones del sur de Marruecos. El segundo ha sido el papel de la diplomacia nacional en la salvaguardia de la integridad territorial del Reino, así como la celebración de una sesión especial el 13 de diciembre de 2020 sobre la situación en la zona de Guergarate. Las intervenciones y el debate de alto nivel en las dos sesiones han reflejado el consenso nacional sobre la integridad territorial y la movilización de todos detrás de Su Majestad el Rey para consolidar los logros, y han transmitido mensajes nacionales sinceros reafirmando la determinación de vencer las ilusiones de los separatistas y los proyectos para sembrar la inestabilidad.
Las preguntas programadas en el resto de las sesiones semanales de preguntas de control, cuyo número es 13 sesiones, han girado en torno a cuestiones sectoriales relacionadas con el contexto de la pandemia y las medidas adoptadas en una serie de sectores vitales para evitar los graves impactos de la pandemia en las actividades económicas y los servicios sociales. La preocupación común de los poderes legislativo y ejecutivo en la programación y discusión de estos temas, en un marco constitucional, ha sido la inmunización de los diferentes sectores y actividades.
La interpelación a los miembros del Gobierno y a los presidentes y directores de las instituciones públicas por parte de las Comisiones Permanentes ha sido una ocasión para un diálogo sincero, constructivo y crítico entre los poderes legislativo y ejecutivo sobre las medidas, los resultados y la gobernanza de 15 sectores que ha hecho posible llegar a recomendaciones sobre la perfección de los servicios y el rendimiento. Este dialogo fue concluido ayer con la discusión del informe de la Comisión de Control de Finanzas Públicas sobre la Caja de Depósito y Gestión “CDG”, una institución cuya importancia estratégica e histórica no se desconoce en el desarrollo de nuestro país.
Las Comisiones Parlamentarias han continuado llevando a cabo misiones exploratorias, sabiendo que la Mesa de la Cámara aprobó 17 misiones. De esta forma, se ha procedido a la presentación y la discusión de dos informes sobre la situación de algunos consulados del Reino y la situación de los establecimientos penitenciarios. Haciendo inventario de la labor de las Comisiones Permanentes, se deduce una mayor tendencia al control, a la vista de la eficiencia de este mecanismo constitucional y su efecto en la gobernanza y el desempeño del servicio público.
En cuanto a la legislación, el balance de nuestro trabajo puede considerarse cualitativo. A pesar del tiempo que suele necesitar el debate y la votación del proyecto de Ley de Finanzas (el 27% del tiempo dedicado a la legislación a nivel de las sesiones plenarias, y el 56% del tiempo dedicado a la legislación a nivel de la Comisiones), la Cámara ha aprobado textos cualitativos, entre ellos por ejemplo, un proyecto de ley sobre la creación del Fondo Mohammed VI para la Inversión, que Su Majestad el Rey había ordenado su creación como mecanismo público estratégico para financiar las inversiones, poner en práctica las asociaciones entre los sectores público y privado, acompañar la dinámica económica y de inversión nacional y crear fondos sectoriales para financiar las inversiones. Nuestra Cámara también ha aprobado leyes destinadas a seguir los avances tecnológicos y a consolidar la confianza en las transacciones financieras y comerciales, como es el caso del proyecto de ley relativo a los servicios de confianza sobre las transacciones electrónicas.
Además de aprobar en principio un conjunto de acuerdos internacionales que fortalecen las relaciones de nuestro país con otros países, hemos aprobado proyectos de ley que son de suma importancia para nuestro panorama intelectual y cultural, como el proyecto de ley sobre la reorganización de la Academia del Reino de Marruecos y los proyectos de ley sobre los museos y la Fundación Nacional de Museos. De este modo, la Cámara ha aprobado durante este período de sesiones 35 proyectos de ley.
Por otra parte, valorizando las iniciativas legislativas de los miembros de la Cámara, nuestra institución ha dedicado dos sesiones a la aprobación de cinco proposiciones de ley, y así el número de textos aprobados asciende a 40. Si bien destacamos la interacción del Gobierno con estas iniciativas, aspiramos a un mayor diálogo, debate y acuerdo con el poder ejecutivo sobre las 223 proposiciones ley acumuladas urgentes.
En aplicación de las directrices de S.M el Rey por parte de la Cámara en dar al desarrollo sus dimensiones social y solidaria, el grupo de trabajo temático encargado del sistema de salud formado por la Cámara, finalizó su labor elaborando un informe que contiene un diagnóstico de la situación del sector de salud, el sistema de cobertura sanitaria y las recomendaciones para una reforma legislativa, institucional y organizativa.
Reflejando el vínculo dialéctico entre nuestros asuntos internos y nuestras relaciones externas, la Cámara ha proseguido su trabajo en lo referente a la diplomacia bilateral y multilateral, a través de la organización de una serie de encuentros temáticos y la participación en las conferencias internacionales, de las cuales varias abordaron el papel de los legisladores por el mundo en la lucha contra la pandemia y sus consecuencias.
Por otro lado, los contactos entablados con una serie de instituciones legislativas nacionales y las organizaciones parlamentarias multilaterales han sido una ocasión para aclarar la posición de nuestro país y seguir dando a conocer la legitimidad de nuestra integridad territorial. En este sentido, constatamos una clara apreciación y una amplia comprensión de las medidas adoptadas por Marruecos y en particular para la imposición de la ley en la zona de Guergarate en el extremo sur de Marruecos, tal y como han subrayado los comunicados y mensajes oficiales emitidos por estas partes.
Nosotros también, en el seno de la Cámara de Representantes, hemos velado por afirmar nuestra solidaridad con los países hermanos, particularmente de África y América Latina, en la lucha colectiva contra la epidemia.
Permítanme, en este contexto, destacar que la lucha contra la epidemia, en particular durante la fase de vacunación, ha revelado tendencias que no corresponden con las responsabilidades comunes de la comunidad internacional. La conciencia global, el deber de solidaridad humana y todos los valores de los derechos humanos se ponen a prueba hoy en esta etapa crucial de la lucha contra la pandemia, y nosotros, queridos colegas, no estaremos satisfechos de que la historia registre que los ricos del mundo han abandonado a la mayor parte de la humanidad en estos difíciles tiempos.
A este respecto, Su Majestad el Rey Mohammed VI al igual que en todos los asuntos internacionales, ha sido anticipador y proactivo. Así, desde el inicio de la pandemia, Su Majestad lanzó una iniciativa a los jefes de Estado africanos para luchar contra el coronavirus. Además, Marruecos, por orden de Su Majestad, proporcionó a algunos países africanos medicamentos y materiales para luchar contra la pandemia al inicio de su propagación.
Estas iniciativas están en el corazón del compromiso de Marruecos con las causas humanitarias y justas de los pueblos, especialmente la cuestión del pueblo palestino que siempre ha encontrado en Marruecos y en los momentos más difíciles de su lucha nacional el apoyo político, diplomático y material. La historia inmortaliza que desde nuestro país se tomaron decisiones cruciales en apoyo al pueblo palestino: la creación de la Organización de la Conferencia Islámica de la que emanó el Comité de Al-Qods, presidido por el difunto Su Majestad el Rey Hassan II, que Dios tenga su alma en Su Santa Misericordia, luego Su Majestad el Rey Mohammed VI, que Dios Le Guarde, y el reconocimiento oficial árabe de la Organización de Liberación de Palestina como el único y legítimo representante del pueblo palestino.
Y como ha señalado Su Majestad, la posición marroquí de apoyo a la causa del pueblo palestino seguirá siendo firme, que el Reino seguirá su compromiso inquebrantable y permanente de defender los derechos del pueblo palestino, y que esta posición no puede ser objeto de ofertas y contraofertas. Una posición basada en la coherencia y apego a los valores de justicia, paz y diálogo, el apoyo a este pueblo en el sufrimiento que ha vivido y en las negociaciones de su legítimo liderazgo para el establecimiento de su Estado independiente con Al -Qods Al- Sharif como capital, cuyo estatus es especial tanto para los Reyes de Marruecos como para el pueblo marroquí.
Señoras y señores,
Nuestro trabajo durante este periodo de sesiones puede considerarse como un episodio fructífero en el fortalecimiento de la contribución de la Cámara de Representantes al enriquecimiento de nuestra legislación nacional, y en el ejercicio del control parlamentario institucional sobre la base de la cooperación y complementariedad entre poderes. Nuestro objetivo es consolidar la práctica democrática, fortalecer la construcción institucional, seguir el camino de la reforma integral, hacer que estas instituciones ganen la confianza de la ciudadanía para que nuestro país continúe posicionándose como una fuerza democrática y económica emergente bajo el liderazgo de Su Majestad el Rey Mohammed VI, que Dios Le Bendiga.
Para concluir, quisiera subrayar que este balance no se hubiera logrado sin la cooperación entre los poderes legislativo y ejecutivo, especialmente el Jefe de Gobierno, el Ministro de Estado encargado de los Derechos Humanos y Relaciones con el Parlamento, y todos los miembros del Gobierno a quienes dirijo mi más sincero agradecimiento, y también a los medios de comunicación nacionales y a los funcionarios de la Cámara por su continua movilización para lograr lo que estamos logrando.